No se hagan los rulos
La vicepresidenta Cristina Fernandez anunció que no será candidata a nada en estas elecciones.
El día de ayer Martes 16 de abril, la Vicepresidenta de la Nación aseguró, y esta vez por escrito, que no será candidata en este año de elecciones presidenciales debido a la proscripción que fue iniciada por la denuncia del fiscal Luciani en la causa de vialidad, dando así el éxito del lawfare en Argentina.
A 40 años de democracia; la inhabilitación de CFK es el reflejo de un desdén político que su única visión democrática es la del acomodamiento judicial para poder elegir contrincantes electorales y a raíz de ello hacer uso del olvido colectivo en cuestiones económicas, sociales y culturales. En la carta emitida CFK hace mención a las últimas dos crisis económicas y sociales que atravesó el país y que ha llevado a la caída política de sus dos presidentes, Raúl Alfonsín con la hiperinflación en 1989 y con Fernando de la Rúa en 2001.
A pesar de las multitudinarias marchas populares hacía Comodoro Py para reclamar por Cristina Presidenta y de las especulaciones de políticos y periodistas, está decisión no solo viene siendo un hecho desde el 6 de diciembre de 2022, sino desde el intento de magnicidio en su contra el 1 de septiembre del mismo año en pleno juicio por la causa vialidad.
La denuncia en su contra caía por falta de pruebas, pero la sentencia ya estaba escrita.
Desde las elecciones en 2019 se veía proyectado en la ilusión de los argentinos y las argentinas en volver a tener el mismo gobierno como el que CFK había dejado, después de la gestión Macri que culminó con la enorme deuda con el FMI y la crisis social que venía atrayendo durante su gestión (2015 – 2019). La figura de Cristina como vice no era la esperada, pero tampoco fue una desilusión, estaba en la boleta y sabía que la gente la iba a poner nuevamente en la Casa Rosada, sabiendo en ese entonces que hacerle frente al FMI sería el principal eje como plan gubernamental.
Luego de la pandemia y la crisis económica mundial que dejó en su paso, las decisiones del presidente Alberto Fernandez no serían del agrado de CFK, adecuarse al plan económico que planteaba el fondo sería desastroso para la recuperación de la toma de decisiones políticas sobre cómo manejar la inflación y mejorar el descontento social. La falta de trabajo, el aumento de la inflación mes a mes, la falta de dólares, la especulación financiera, la crisis política y la famosa grieta con todos sus personajes políticos opositores serían un problema para el gobierno, ergo Alberto Fernandez y gabinete, pero no sobre ella.
‘’La bala que no salió y el fallo que sí saldrá’’ citó al mencionar a Magnetto que es el dueño del Grupo Clarín, medio del cuál la ‘libertad de expresión’ fue demasiado contundente en lo que respecta la responsabilidad política para los medios de comunicación. Principal medio que se encargó de ser vocero de la última dictadura militar, contando lo de papel prensa en conjunto con el diario La Nación.
Rosatti, Rosenkrantz, Maqueda y Lorenzetti son los jueces que designó el ex presidente Macri para hacerse cargo de la Corte Suprema de justicia, misma Corte Suprema que la semana pasada inhabilitó las elecciones en Tucuman y San Juan para que Manzur y Uñac no puedan ser elegidos a tan solo 72 horas del inicio de la veda electoral para las elecciones del domingo 14. Sin lugar a dudas si Cristina afirmaba que sería candidata pasaría lo mismo, es un manual de elecciones, debilitar al que más chances tiene para subir la moral de los candidatos y candidatas que darían vía libre para todo tipo de negocios de índole privada y que Argentina sea tierra de nadie.
Mientras más se piensa más asusta, las elecciones presidenciales están cada vez más cerca y los únicos que están contentos con esta decisión es la oposición que por más encuestas insustanciales que hagan CFK no ocupará números en porcentaje.
Esto no fue una demostración del terror de la casta o un sin falta de ánimos para volver a tomar las riendas de lo que una vez se arregló, esta es la demostración de lo que pasa cuando la justicia (que ya en sí no es democrática) interviene en asuntos ligados a la voluntad popular.
La oposición gobierna más que el oficialismo, la Casa Rosada es el Palacio de Justicia y las cadenas nacionales son tapas de diarios manchados de sangre de argentinos y argentinas que apostaban por un mejor país con más y mejor democracia.
En un país de palomas y leones, de águilas y halcones, los dinosaurios usan traje y corbata.