La violencia de género, no reconoce fronteras.
25 de noviembre: Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer.
Esta fecha conmemorativa fue elegida para honrar la memoria de las hermanas Mirabal, Patria, Minerva y María Teresa, que fueron tres activistas políticas de la República Dominicana, y que fueron asesinadas brutalmente en el año 1960 por orden del gobernante Rafael Trujillo. Este hecho generó muchísimas protestas en el país y aquellas mujeres se convirtieron en un símbolo latinoamericano de la lucha en contra de la violencia de género.
Este día es muy importante, ya que la violencia contra las mujeres y las niñas es una de las más extendidas en todo el mundo, ya sea violencia psicológica, sexual o física. Estos actos de violencia afectan a las mujeres durante toda su vida. La OMS estima que 1 de cada 3 mujeres sufre violencia de género. Si bien todas las mujeres pueden sufrir violencia de género, algunas mujeres y niñas pueden ser más vulnerables, como es el caso de las niñas, las mujeres mayores, las mujeres que se identifican como lesbianas, bisexuales o transgénero, las migrantes, las de pueblos indígenas, las de bajos recursos, entre otras minorías.
A causa de la pandemia y del confinamiento, los indicadores muestran un aumento de la violencia doméstica, debido también al limitado acceso que tienen las mujeres a los servicios públicos de atención. Actualmente, muchas mujeres y niñas deben convivir con su agresor día tras día. Esto tiene sus raíces en la falta de ingresos y recursos que ellas tienen, sabiendo que globalmente son más pobres que los hombres y que la tasa de pobreza de las mujeres apunta a un aumento del 9,1%.
Cabe destacar que la violencia de género por parte del Estado existe, y la vemos reflejada en la necesidad de la implementación de la Educación Sexual Integral en todos los colegios y en todos los niveles, y también en el proyecto de ley del Aborto Legal, Seguro y Gratuito, que aún no se aprueba y que seguimos exigiendo. Ya no deben haber muertes por abortos clandestinos, que a fin de cuentas, datan de la ausencia del Estado.
También debemos señalar la importancia de reconocer la violencia a tiempo, poder notar aquellos indicios o actitudes del violento. Cuando escuchamos frases como “si no sos mía, no sos de nadie” o “estás loca, lo inventaste todo”, es violencia machista, y debemos pedir ayuda. Expresiones como las nombradas suelen ser los primeros signos que determinan una relación abusiva y deben encender una luz de alerta para prevenir hechos más graves.
